El freestyle está en pleno auge en San Juan y los niños y adolescentes están prendidos en esa ola que se ha convertido en un nuevo ámbito de contención. Sparta y Darwin participan en las competiciones que se realizan en las plazas de la provincia y, por eso, el mundo del freestyle los atraviesa en su vida cotidiana. Ellos contaron sus sensaciones de pertenecer a la cultura urbana sanjuanina.
Santiago González, más conocido como Sparta, tiene 16 años y empezó a los 12 años a practicar freestyle. Desde entonces no paró y ahora participa activamente en cada una las competencias. “En el 2017 estaban de moda las batallas de frikismo que hacían competencias de rap. Una vez me salió en internet una batalla del Quinto Escalón que eran chicos como nosotros que freestyleaban y, gracias a eso, me enteré de que había gente que hacían competencias en la vida real”, contó.
Sparta considera al freestyle como un cable a tierra para expresar sus sentimientos. Foto: Sergio Leiva/DIARIO HUARPE.
Más adelante, entabló contacto con chicos que se dedicaban a lo mismo y allí empezó su carrera en el ambiente del freestyle local, algo que le abrió nuevas puertas y otra forma de asimilar la vida.
“Lo veo como una manera de expresar lo que siento y una salida. Por ahí tengo problemas conmigo mismo y así me libero un montón largando freestyle. Conocí gente impresionante e hice amigos”, comentó Sparta.
En sus comienzos le costó ingresar en el ambiente de las competiciones, aunque después tomó confianza y pudo avanzar en las etapas. “En mi primera competencia no pase ni a clasificatorias y así estuve un año. El 2021 fue mi mejor año porque ahí me solté. Con mis amigos me suelto, pero en las competencias se sienten nervios”, continúa relatando Spàrta.
Destacó que la cultura del freestyle es muy unida y solidaria, y entre todos colaboran para alcanzar su mejor versión. “Siempre adentro de una batalla no nos tratamos como amigo, pero afuera nos damos un abrazo”, dijo. El sentimiento de amistad es más fuerte que la competencia y se destaca en esa cultura que crece día a día en todo el país y tiene como referentes nacionales a Duki, Wos, Paulo Londra, Niki Nicole, Cazzu, entre otros.
Otro chico que practica freestyle es Gastón Cabanay, más conocido como Darwin, quien conoció a Sparta gracias al ambiente del freestyle. “Es un arte de expresión y le tengo mucho amor desde el alma”, manifestó con emoción.
Darwin ama el ambiente del freestyle y destaca la amistad que hay. Foto: Sergio Leiva/DIARIO HUARPE.
Darwin también conoció ese ámbito gracias al frikismo y rapea desde el 2017. Ahora participa en los distintos torneos organizados en las plazas. “Para mí es importante porque me saca de todo lo malo, las frustraciones, lo malo de la familia”, contó Darwin y dijo que para él sus amigos del freestyles son como otra familia.
“El freestyle me enseñó la amistad. Tengo lazos muy buenos con los pibes, me apoyan y los apoyo”, siguió relatando.
Para Darwin pertenecer a la cultura urbana le ha permitido superar miedos, frustraciones y lo considera como una puerta a la paz. “En lo personal me ayuda un montón y me abrió la cabeza”, contó.
De esta manera, el freestyle se convierte en una disciplina donde los niños encuentran un espacio para expresarse y encontrarse con su interior. Es lo que manifestó Darwin. “Me genera una tranquilidad y amor eterno”.
Con Sparta se conocieron en la plaza del barrio Costanera, donde se juntaban a practicar freestyle. Al principio competían, pero ahora entablaron una amistad de hierro. “Nos hicieron enfrentar y no nos llevábamos tan bien. Sin embargo, después nos fuimos haciendo amigos y nos apoyamos mutuamente”, finalizó.