La jueza López dijo que la convocatoria pública tuvo buena repercusión. Qué pasos siguen en esta particular búsqueda de padres para una bebé de 2 años.
Desde el 14 de septiembre se abrió una particular convocatoria pública en San Juan que conmovió desde el primer día: la Justicia busca padres para una nena de dos años con discapacidades. Al día siguiente, ya había muchas consultas sobre el caso de interesados, pero ahora se conoció que hay en carrera 45 postulantes formales inscriptos para quedarse con la tutela de la pequeña.
Así lo confirmó a Tiempo de San Juan la titular del Primer Juzgado de Familia, Marianela López: “Venimos muy bien. Hay aproximadamente 45 postulantes inscriptos y ahora se los está entrevistando”, indicó la magistrada.
Respecto se los anotados, la jueza valoró que “ha sido muy importante la recepción e interés de la sociedad”.
Este caso moviliza en San Juan porque se llegó a la convocatoria pública de adopción, que se da cuando no hay postulantes inscriptos, es decir que no hubo nadie que aceptara un niño en esta situación en los registros oficiales, con lo que el paso siguiente es la apertura en general. Incluso los mismos inscriptos pueden rever su situación y postularse.
El pedido de adoptantes no se circunscribe solo a matrimonios, también pueden anotarse parejas y una personas individual. En este caso justamente no todos los inscriptos son matrimonios, precisó la jueza.
“La niña es tranquila y le gusta interactuar con las personas. Presenta atrofia muscular, dificultad en el lenguaje y disminución visual. Se encuentra respondiendo favorablemente a sus tratamientos y estimulación, y está bajo realización de estudios por médicos especialistas, según se manifiesta en el expediente tramitado en el Primer Juzgado de Familia.
¿Cómo sigue? La jueza dijo que en un plazo de dos semanas más estarían terminando las entrevistas para seleccionar a la posible familia o pareja o persona individual que pasará a la instancia de vinculación con la niña. Se trata de un proceso que implica ver si de da bien el relacionamiento entre la menor y los adoptantes, de manera de avanzar en la tutela. Más en este caso que en medio hay un cuadro de salud complejo y un tratamiento médico en marcha.