En los últimos días la Liga Sanjuanina de Fútbol es noticia pero no por hechos vinculados a lo deportivo sino por la crisis dirigencial en cuanto a algunas decisiones que se han tomado. Ahora, se le suma la renuncia de todos los miembros del Tribunal de Penas.
Según lo que pudo conocer este medio, esta decisión estaría vinculada a cómo se resolvió la cuestión “segundo ascenso de la B”. Cabe recordar que ante el reclamo de Centenario Olímpico por la errónea inclusión de jugadores de Sarmiento de Zonda en la final del 31 de diciembre, el ente mayor del fútbol sanjuanino decidió otorgarle el ascenso a los chimberos. El partido había terminado en empate 0 a 0 y en los penales los zondinos ganaron 3 a 1.
Con este panorama los siete miembros del Tribunal presentaron su renuncia al no estar de acuerdo con la determinación de las máximas autoridades de la Liga.
A todo esto, los dirigentes de Sarmiento están recabando todas las pruebas para presentar su protesta en el Consejo Federal, dependiente de la AFA. Los zondinos aducen que sus jugadores fueron bien incluidos en el partido decisivo y se sienten muy perjudicados al no obtener el ascenso. Si Sarmiento acude al Consejo, el campeonato peligra en su comienzo. Otra alternativa es que empiece, pero que el partido de ese club ascendido contra Del Bono quede postergado.
Sea como sea que resuelvan ese tema fuera de San Juan, ahora se presenta otra circunstancia problemática ¿Qué sucederá con los campeonatos que deben comenzar en el ámbito de la Liga si el Tribunal de Penas no tiene miembros en actividad? En principio podrían empezar ya que ante la ausencia de ese cuerpo y por estatuto es el propio presidente quien tomaría la tarea, aunque claro, sería una vergüenza que ocurra todo esto. El torneo de Primera tiene fecha de inicio el 13 de febrero.
Por lo tanto, ¿Qué debería pasar? El Consejo Directivo tendría que llamar a una asamblea extraordinaria para designar a los nuevos miembros del Tribunal. Habrá que ver cómo termina esta novela que a esta altura ya tiene varios capítulos, bochornosos por cierto.