Por Lucas Laciar
Este miércoles se realizó la audiencia de control de acusación por el caso de la estética Eros for Men, sospechada de ejercer la prostitución. El caso causó revuelo en la sociedad sanjuanina, principalmente, cuando la dueña del lugar, Liam Patricia Coria, que es una reconocida maquillista, afirmó que entre sus clientes había personas muy reconocidas en la sociedad sanjuanina.
Tambien está imputada su hija, Natalia María Pablo. Si bien en un principio ambas estuvieron detenidas, tras pagar una fianza de $200.000 (la madre) y $80.000 (la hija), quedaron en libertad. Ahora enfrentarán un largo Juicio que podría arrancar en 10 o 15 días, estiman desde la Fiscalía. Es que tendrá cerca de 40 personas que darán testimonio.
En la audiencia de este miércoles, la fiscalía presentó las pruebas que tiene para el juicio, los testigos que van a citar a declarar, los peritajes informáticos y documentales. Este sentido el Ministerio Público Fiscal (MPF) formalizó la acusación por el delito de “prostitución agravada” para Coria y su hija y pidió 15 años de prisión efectiva.
De acuerdo a lo señalado por fuentes judiciales, la defensa no presentó oposición a las pruebas qué adelanto la Fiscalía para el juicio. Por su parte, el MPF tampoco presentó oposición a las pruebas que va a presentar la defensa.
“La defensa ofreció 15 testigos que serían clientes que iban a hacerse masajes entre ellos dos psiquiatras y dos psicólogos. No hubo controversia”, señaló a Zonda Diario, el fiscal de la causa Juan Manuel Gálvez.
En este sentido, adelantó que presentará “la declaración de la denunciante, la declaración de cuatro chicas que trabajaban en Eros y la declaración de los peritos informáticos y los policías que realizaron los allanamientos, que secuestraron las diferentes cosas del lugar y qué hicieron la detención de la señora Coria, entre otros procedimientos“.
Los abogados defensores de las acusadas son Laura Reus y Leonardo Villalba. Ambas no se presentaron en la ausencia, pero sus representantes ya fueron notificados formalmente. El Juez de Garantías Andrés Abelín Cottonaro resolvió elevar la causa a juicio. Ahora la oficina judicial determinará cuando se dará inicio a este debate oral y público.
¿Se publicará la lista de clientes de Eros?
“Si hay una lista de clientes”,confirmó, “algunos han ido por masajes y otros han pagado. Eso está en todo el soporte técnico de los extractos de los celulares, están los números de teléfonos con las fotos de WhatsApp de cada uno”, respondió el fiscal.
Al ser consultado sobre si los que pagaron por un supuesto servicio sexual, serán citados a declarar, Gálvez indicó que “no hace falta que se publique o se dé a conocer la lista de los clientes”. Es que argumenta que, “no han cometido un delito, lo que está penado es la facilitación y la promoción de la prostitución o sea ser cafizo”.
Testimonio clave
Gálvez asegura que “los testimonios de las chicas que van a declarar son testimonios de yo hice, no de yo vi o me contaron. Las mujeres van a contar lo que hicieron, en qué consistía cada cosa, cuánto cobraban, quién recibía la plata y como era el sistema”.
Los detalles del caso
Esto se conoció en una de las audiencias pasadas, antes de que las imputadas sean liberadas por pagar una fianza:
“La señora denunciante, de 19 años, comenzó a trabajar en el lugar el 21 de marzo pasado, como esteticista. Coria, publicó un anuncio en su cuenta de Facebook solicitando esteticista para prestar servicio. La denunciante se puso en contacto el 19 de marzo y participó de una entrevista laboral, donde la denunciada le explicó que, en la estética se realizaba diversos tipos de masajes, entre ellos, relajantes, descontracturantes, suecos y sensitivos”, relató el fiscal Juan Galvez.
Y continuó: “En estos, la masajista debía sacarse el ambo y el corpiño para quedarse con el torso desnudo. Por su parte, el cliente podía tocar y besar sus pechos, culminando con la masturbación del cliente. Además, se ofrecían masajes completos, que culminaban con penetración del cliente a la masajista. El valor de los masajes aumentaba conforme aumentaban las prácticas sexuales”.
Para detallar, “también se ofrecían masajes a cuatro manos, en modalidad sensitiva, en el que participaban dos masajistas que se encontraban con el torso desnudos, que culminaba con masturbación al cliente, mientras la otra le tocaba otras zonas erógenas. O en su modalidad completa, que era similar, pero culminaba con penetración”.
Siguiendo con lo informado por el Fiscal, Coria le manifestó a la denunciante cuando comenzó a trabajar que podría hacer los masajes que quisiera. Pero la persuadía diciéndole que el precio de los masajes, de los cuales le pagaba el 30 por ciento.
Según el detalle, le abonaba $3.000 por ofrecer masajes descontracturantes, $5.500 por los sensitivos y $7.000 por los completos.
A su vez, debían trabajar entre las 9 y 20 horas, de lunes a sábado. En total eran cinco las empleadas que trabajaban en el lugar, quienes no estaban registradas y atendían entre 1 a 5 hombres por día.
En ese contexto, la joven que hizo la denuncia indicó que, “al igual que sus compañeras, accedió porque necesitaba el dinero. Y que, al momento de realizar la tarea siempre se encontraba sola en un box, la tocaban y la penetraban. Eso le provocaba malestar, incomodidad, asco y repugnancia. Pero seguía debido a su necesidad y el sentimiento de culpa”.