Los automovilistas que protagonizaron el choque fatal de 9 de Julio el lunes pasado habían tomado alcohol antes de salir a manejar, según informaron fuentes judiciales. A días del siniestro vial, se conocieron los resultados de la alcoholemia, tanto de la víctima como del conductor que sobrevivió.
El fallecido Juan Pablo Montoya tenía 1,60 gramos de alcohol en sangre, mientras que Hugo Giménez no pasó el 0,5, límite establecido por ley, informaron fuentes de la Unidad Fiscal de Investigación Delitos Especiales.
El siniestro vial ocurrió el lunes por la tarde, en Ruta 155, entre calles Costa Canal y Zapata. El fiscal Francisco Micheltorena tratará de establecer quién invadió el carril contrario a través de la recolección de testimonios de los demás protagonistas y vecinos de la zona. Es que los conductores viajaban acompañados.
Montoya viajaba en un VW Bora acompañado por su mujer Rosana Chandía, de 49 años, y Lucas Céspedes, de 17. Este último quedó internado en grave estado debido a una herida complicada en el cráneo.
Giménez, que fue llevado este jueves a Tribunales para ser imputado por homicidio culposo y ser investigado por seis meses, viajaba en un VW Polo junto a gran parte de su familia. Ninguno salió con heridas serias.
En Tribunales, la jueza Gema Guerrero dictó la excarcelación de Giménez tras escuchar a las partes de la audiencia de formalización y control de detención. El fiscal Micheltorena no pidió la prisión preventiva, aunque sí que Giménez se someta a la investigación las veces que sean necesarias.