Un hombre de 9 de Julio fue condenado a 3 años de prisión condicional (no va preso) por abusar sexualmente de su hija de 13 años. El sujeto, no identificado para proteger a la víctima, fue encontrado culpable del delito de abuso sexual agravado por el vínculo y por la situación de convivencia, dijeron fuentes judiciales.
Según los voceros, quedó acreditado que el día 6 de marzo de este año, la víctima, su madre y su padre salieron a despedir a una familiar. Cuando la madre de la menor entró a la casa (adentro estaban dos hijas mellizas), escuchó como un “juego” entre su marido y su hija, que se quedaron en la vereda, detrás de la camioneta.
Luego la menor entró por la puerta principal, acomodándose el pelo, como con ganas de llorar. Y él ingresó por la puerta del costado. La mujer le preguntó qué le hizo a la niña, contestándole él que nada. Ella le insistió pero él le dijo que solamente le había “apretado la panza” y luego que le había “apretado la mano”.
Ante esa contradicción, la madre no se quedó tranquila. Así, dejó pasar un rato y cuando el hombre estaba sentado en el living de casa, alrededor de las 23, fue a su habitación y llamó a la menor para que la ayudara con las mellizas. Es allí donde le preguntó qué había pasado con su papá. Ella le dijo que nada, pero le insistió porque ya desconfiaba, ya que cuando regresó del hospital de dar a luz, hacía 7 meses, su hija la había abrazado y se había largado a llorar de forma extraña. En ese momento la menor le contó que “él (en referencia al padre) me tocó en la parte de adelante” (ese día ella tenia puesto un pantalón corto).
La madre le preguntó si antes la había tocado y ella le dijo que sí, que desde que vivían en Pocito (hace aproximadamente dos años que viven en 9 de Julio), y que el padre le decía que no contara nada. También le reveló que había hecho lo mismo cuando ella estuvo internada en el hospital.
Dos días después de eso, el 8 de marzo, a eso de las 14, cuando el sujeto regresó de trabajar, la mujer lo enfrentó nuevamente por lo que pasó. El hombre se hizo el desentendido, negando lo sucedido y rogando que no realizara lo denuncia. Luego se largó a llorar y le pidió perdón a su hija por lo que había hecho.
Ese mismo día la mujer hizo la denuncia en la UFI Anivi y hoy el acusado aceptó ser condenado en un juicio abreviado.