España flexibilizó este martes los requisitos para los trabajadores extranjeros sin documentos legales a fin de regularizar su situación y regular los empleos en sectores afectados por la escasez de personal como la hotelería y la agricultura.
El decreto reforma una ley de extranjería vigente y facilita a los empleadores españoles contratar empleados en sus países de origen. Asimismo, facilita los requisitos para obtener el permiso de trabajo para los que ya están arraigados en España.
Esta reforma, adoptada en el Consejo de Ministros, prevé “medidas de mucho calado”, que tienen como objetivo propiciar “una migración regular ordenada y segura”, afirmó el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en rueda de prensa.
Estas medidas pretenden “mejorar el modelo migratorio español y sus procedimientos, en muchos casos lentos e inadecuados, lo que genera periodos prolongados de irregularidad, con altos costes sociales y económicos”, subrayó el ministerio.
Se calcula que alrededor de medio millón de personas trabajan en la economía informal en España.
Los trabajadores extranjeros con más de dos años de permanencia en el país pueden solicitar documentos temporarios de residencia al inscribirse en cursos de capacitación para trabajos en sectores de alta demanda.
Los estudiantes extranjeros podrán empezar a trabajar en España apenas se gradúen en lugar de tener que esperar tres años. También podrán trabajar hasta 30 horas semanales mientras estudian.
Los extranjeros que pueden demostrar que viven en España desde hace al menos dos años y han trabajado sin documentos durante al menos seis meses también pueden solicitar permisos.
Escrivá dijo que el ministerio actualizará una lista de sectores faltos de mano de obra para tener un cuadro más preciso del mercado laboral. Los sectores como la hotelería y la agricultura padecen tradicionalmente de personal y recurren a migrantes sin papeles.
La nueva norma favorece igualmente la reagrupación familiar y la concesión de visados de trabajo en los sectores de actividad más tensionados, simplificando y uniformizando los procesos administrativos a seguir.
A pesar de tener una de las tasas de desempleo más elevadas de la zona euro, del 13,65%, España padece desde hace años una falta de mano de obra en algunos sectores de actividad, como la hostelería, la agricultura, la construcción o los transportes.
Este fenómeno, que se agravó tras la pandemia de covid-19, es regularmente señalado por las empresas de estos sectores, que aseguran tener problemas para contratar empleados, lo que limita sus perspectivas de crecimiento.